¿Has oído hablar de la salud ocupacional? Implementa programas y políticas que protejan la salud y seguridad de los empleados en el trabajo

Sales & Fit for companies • 11 de julio de 2023


La salud ocupacional dentro de una empresa es un factor que se encarga de priorizar el bienestar de los empleados. Este concepto es clave para alcanzar el éxito y el crecimiento de cualquier organización. Cada vez más empresas reconocen la importancia de brindar un entorno de trabajo seguro y saludable para el personal.


La puesta en marcha de medidas de salud ocupacional protege a los trabajadores de lesiones y enfermedades. Además, también aumenta su eficiencia como profesional y crea un ambiente laboral positivo.


Cuando hablamos de salud ocupacional, nos referimos a un
mantenimiento del bienestar físico, mental y social que implica a la organización a todos los niveles.


Antes de nada, es primordial identificar y controlar los riesgos laborales.
Se deben tener claros cuáles son los posibles riesgos presentes en el entorno de trabajo. Por eso, se han de realizar evaluaciones y auditorías regulares para identificar cualquier factor que pueda poner en peligro la salud de los trabajadores.


El siguiente paso, una vez identificados los riesgos, es
instaurar medidas adecuadas de control y prevención, como por ejemplo, la instalación de equipos de protección personal que mejoren las condiciones de trabajo.


Otro punto a tener en cuenta es la promoción de estilos de vida saludables entre los empleados. De esta forma, se previenen enfermedades relacionadas con el trabajo, como el nerviosismo, estrés laboral o ansiedad. Para controlar estos factores, las empresas pueden implementar programas que incluyan actividades físicas, programas de nutrición y asesoramiento sobre salud mental.


Pero todos estos aspectos no sirven de nada si no se tienen en cuenta la capacitación y concienciación, características clave de la salud ocupacional. Los empleados deben recibir capacitación sobre los riesgos laborales específicos asociados con sus funciones, así como sobre las medidas de prevención y protección que deben seguir. Además,
la empresa debe fomentar una cultura de seguridad y salud, donde los empleados se sientan cómodos al informar sobre cualquier situación de riesgo o inseguridad.


Por último,
te recomendamos facilitar al personal un correcto acceso a la atención médica, realizar exámenes médicos periódicos y brindar asistencia en caso de lesiones o enfermedades.

En Sales & Fit estamos comprometidos con la salud
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Por Marvin Singhateh Duran 15 de mayo de 2025
¿Tu cultura refuerza o contradice tu estrategia? En un entorno empresarial cada vez más competitivo y cambiante, la cultura organizacional se ha convertido en un factor determinante para el éxito sostenible de las empresas. Más allá de los slogans corporativos, las organizaciones que viven sus valores en el día a día logran equipos más comprometidos, decisiones coherentes y resultados sostenibles. La cultura empresarial: mucho más que una declaración de intenciones La cultura empresarial es el conjunto de valores, creencias, actitudes y comportamientos que definen la identidad de una organización. No se trata solo de lo que se dice, se trata de lo que se hace y se vive en cada interacción, decisión y proceso dentro de la empresa. Una cultura empresarial sólida y coherente actúa como una brújula que guía a los empleados hacia los objetivos estratégicos, fomentando un sentido de pertenencia y alineación con la misión de la empresa. El impacto tangible de una cultura vivida Implementar y vivir una cultura empresarial coherente tiene efectos positivos medibles en diversos aspectos de la organización: Compromiso y retención del talento : Las empresas con culturas organizacionales fuertes experimentan un mayor compromiso por parte de sus empleados, lo que se traduce en una menor rotación de personal y una mayor retención del talento. Productividad y rendimiento : Un entorno de trabajo positivo y alineado con valores compartidos fomenta la colaboración y la eficiencia, aumentando la productividad general de la empresa. Innovación y adaptabilidad : Las culturas que promueven la creatividad y la apertura al cambio facilitan la innovación y la capacidad de adaptación a nuevos desafíos y oportunidades. Reputación y atractivo para el talento : Una cultura empresarial positiva mejora la imagen de la empresa en el mercado, atrayendo a candidatos que buscan organizaciones con valores alineados a los suyos. Ejemplos de culturas empresariales exitosas IKEA : La empresa sueca ha construido una cultura basada en la humildad, el trabajo en equipo y la mejora continua, lo que ha contribuido a su éxito global. Google : Con una cultura que valora la innovación y la autonomía, Google ha fomentado un entorno donde los empleados se sienten empoderados para proponer y desarrollar nuevas ideas. PepsiCo Latinoamérica : Bajo el liderazgo de Paula Santilli, la compañía ha implementado una estrategia de diversidad e inclusión, logrando que el 65% de su comité ejecutivo esté compuesto por mujeres, lo que ha fortalecido su cultura organizacional y su desempeño en la región. ¿Cómo alinear la cultura con la estrategia empresarial? Para que la cultura empresarial refuerce la estrategia de la organización, es fundamental: Definir claramente los valores y comportamientos esperados : Establecer cuáles son los principios que guían las acciones y decisiones dentro de la empresa. Comunicar y ejemplificar los valores desde el liderazgo : Los líderes deben ser modelos a seguir, demostrando con sus acciones el compromiso con la cultura definida. Integrar la cultura en todos los procesos organizacionales : Desde la selección y formación de personal hasta la evaluación del desempeño y la toma de decisiones estratégicas. Medir y ajustar continuamente : Evaluar regularmente cómo se vive la cultura en la organización y realizar los ajustes necesarios para mantener la coherencia y efectividad. Conclusión La cultura empresarial no es un elemento decorativo ni un conjunto de frases inspiradoras en la pared. Es un activo estratégico que, cuando se vive auténticamente, impulsa el compromiso, la innovación y los resultados sostenibles. En Sales & Fit, creemos que una cultura empresarial coherente y alineada con la estrategia es la base para construir organizaciones saludables, humanas y de alto rendimiento. Diseñamos culturas saludables que impulsan la motivación, reducen el desgaste y generan resultados medibles. 👉 ¿Tu cultura empresarial promueve salud o agotamiento? Te ayudamos a convertir la cultura en tu mayor ventaja competitiva. Contáctanos y empieza a construir una organización más humana, coherente y rentable.
Por Marvin Singhateh Duran 13 de mayo de 2025
Introducción Muchos líderes comerciales dominan las técnicas de cierre, conocen sus productos y han memorizado cada guion para responder objeciones. Sin embargo, siguen enfrentando un problema silencioso: equipos agotados, rotación alta y falta de motivación. En un entorno comercial cada vez más desafiante, el verdadero diferencial ya no está en saber vender más o más rápido, sino en sostener el rendimiento sin quemar al equipo. Aquí es donde entra el entrenamiento emocional. Por qué el entrenamiento emocional supera al control de objeciones El "control de objeciones" es una herramienta técnica que actúa en la superficie. El entrenamiento emocional, en cambio, actúa en la raíz. Enseña a los equipos a: Regular el estrés en entornos de alta presión. Identificar emociones propias y ajenas durante una conversación de ventas. Generar confianza auténtica con el cliente, más allá de las palabras. Según un estudio de TalentSmart, el 90% de los vendedores con mejor desempeño tienen niveles altos de inteligencia emocional (IE). Además, Harvard Business Review reportó que las empresas que invierten en bienestar emocional aumentan su productividad hasta un 20%. Impacto medible en el rendimiento comercial Integrar inteligencia emocional en la formación comercial no solo mejora el clima laboral, también potencia resultados. Datos recientes muestran que: El 35,3% de los empleados ha considerado renunciar en los últimos 6 meses por razones vinculadas al desgaste emocional. Las empresas con culturas comerciales saludables tienen un 23% menos de rotación. Un empleado feliz es hasta un 13% más productivo (El HuffPost). Del individuo al equipo: una formación transformadora Muchos cursos de IE se enfocan en el desarrollo individual. En Sales & Fit, vamos más allá: diseñamos experiencias grupales que impactan en la cultura del equipo. Nuestro enfoque combina: Dinámicas de conciencia emocional aplicadas al entorno comercial. Role plays donde se entrenan conversaciones reales bajo presión. Diagnósticos de salud emocional y clima organizacional. Esto permite formar vendedores más empáticos y equipos más cohesionados, con menos fricción interna y mayor enfoque colectivo. Sales & Fit: integrando IE con resultados medibles Desde 2018, en Sales & Fit hemos acompañado a más de 250 organizaciones en su transformación comercial. Nuestro diferencial radica en combinar bienestar organizacional con estrategias comerciales efectivas. Nuestro modelo incluye: Autodiagnóstico emocional : para entender el punto de partida real del equipo. Talleres de entrenamiento emocional : donde la teoría se convierte en práctica viva. Seguimiento con tecnología SaaS : para medir avances en motivación, retención y clima. Empresas que han adoptado este enfoque reportan: Reducción del absentismo en un 18%. Mejora del NPS interno en más de 20 puntos. Incremento en la conversión comercial de hasta un 15%. Conclusión Entrenar emocionalmente a los equipos de ventas no es una moda, es una estrategia de supervivencia en un entorno de alta exigencia. La inteligencia emocional no sustituye las técnicas de ventas, las potencia. Y lo más importante: protege a las personas que las ejecutan. ¿Estás formando a tu equipo para vender más o para sostenerse mejor en el tiempo? Hablemos .
Por Marvin Singhateh Duran 11 de mayo de 2025
¿Qué pasa cuando una cultura empresarial que presume de ser “orientada a resultados” se convierte en una fuente silenciosa de desgaste emocional? Muchos CEOs se enfrentan hoy a una paradoja incómoda: los equipos venden, pero no se sostienen. Los números llegan, pero la gente se va. El clima se tensa, las reuniones se enfrían, y poco a poco, la energía comercial se apaga. ¿Te suena? Si es así, quizá no sea una cuestión de talento, quizá sea algo más profundo: la cultura comercial que los rodea . ¿Qué es una cultura empresarial saludable (y qué no)? Una cultura empresarial saludable no es una oficina con fruta y yoga los jueves. Es el entorno emocional, relacional y operativo que eleva a los equipos , no que los exprime. Es aquella que promueve el bienestar como un activo estratégico , y no como un "extra" decorativo. Según Deloitte, el 79% de los empleados cambiaría de empresa si se eliminan las políticas de flexibilidad laboral. El dato habla claro: las personas ya no se quedan por un sueldo, sino por una cultura que las sostenga. Las 3 señales que indican que tu cultura comercial podría estar haciendo daño (aunque nadie lo diga en voz alta) 1. La presión dejó de ser un estímulo y se volvió una amenaza La exigencia es sana… hasta que se vuelve miedo. Cuando el “urgente” es la norma, y el lenguaje comercial está plagado de términos como “dar el 200%”, “reventar objetivos” o “no hay excusas”, el cuerpo y la mente entran en modo supervivencia. El resultado: agotamiento crónico, reactividad emocional y creatividad bloqueada . Dato: El 35,3% de los empleados ha considerado renunciar en los últimos 6 meses por cuestiones emocionales o culturales. 2. Hay resultados, pero no hay equipo Una cultura enfocada solo en “cerrar ventas” puede funcionar a corto plazo. Pero si no cuida el clima relacional, los lazos se erosionan. Las reuniones se vuelven frías, la colaboración desaparece y cada quien cuida su parcela. Lo que parecía “profesionalismo” era, en realidad, desconexión emocional . Dato: El impacto del clima interno en la experiencia del cliente puede definir hasta un 30% de las decisiones de recompra, según diversos estudios de experiencia de cliente. 3. Rotación silenciosa o activa: el talento ya no quiere quedarse Algunos se van sin irse. Cumplen, pero ya no creen. Otros, simplemente, se van. Si notas una dificultad creciente para atraer talento comprometido, o una fuga silenciosa de los mejores perfiles, revisa tu cultura. Dato: Los costes de rotación pueden llegar hasta el 300% del salario bruto del empleado . Entonces, ¿cómo se construye una cultura comercial saludable y de alto rendimiento? Desde Sales & Fit lo tenemos claro: bienestar y resultados no están reñidos. Se potencian mutuamente. Te compartimos nuestro enfoque, aplicado en más de 250 empresas: 🔹 Diagnóstico cultural y emocional Medimos el estado actual del equipo: clima, liderazgo, engagement y alineación con valores. 🔹 Formación en liderazgo consciente Capacitamos a líderes para que dejen de ser jefes reactivos y se conviertan en referentes emocionales y estratégicos. 🔹 Planes de bienestar integrales No hablamos de perks. Hablamos de sistemas medibles que cuidan la energía, la cohesión y el propósito de los equipos. 🔹 Seguimiento con tecnología SaaS Evaluamos el impacto real de las acciones en productividad, absentismo y satisfacción del cliente. Cultura empresarial saludable ≠ Cultura blanda Crear una cultura saludable no es "bajar la guardia". Es todo lo contrario: es elevar el estándar. Exige más inteligencia emocional, más liderazgo auténtico, más diseño estratégico. Y, sobre todo, más valentía para mirar lo que muchos prefieren ignorar. Actúa ahora si reconoces alguna de estas señales en tu empresa Una cultura puede ser tu mayor ventaja competitiva… o tu mayor fuga de energía. ¿Y tú? Tu cultura comercial, ¿empuja o eleva?
Por Marvin Singhateh Duran 9 de mayo de 2025
Introducción: Rendimiento sí, pero no a cualquier precio Durante décadas, la fórmula del éxito en ventas ha estado dominada por una lógica clara: más presión = más resultados. Equipos comerciales exigidos al máximo, objetivos agresivos y una cultura del “nunca es suficiente”. Pero los datos nos obligan a hacer una pausa. El 35,3% de los empleados ha considerado renunciar en los últimos 6 meses. El absentismo y la rotación laboral alcanzan picos históricos, afectando directamente la productividad. Un empleado feliz es hasta un 13% más productivo (Oxford University). Las empresas con altos niveles de bienestar retienen hasta un 40% más de talento (Gallup, 2023). El rendimiento sostenible no es una contradicción. Es una evolución necesaria. El espejismo del alto rendimiento tradicional Presionar a un equipo no es liderarlo. En Sales & Fit, lo hemos visto en empresas de todos los tamaños: culturas comerciales donde el “alto rendimiento” se traduce en desgaste físico, estrés emocional y una desconexión progresiva del propósito. Muchos líderes creen que exigir más es igual a lograr más. Pero el verdadero rendimiento aparece cuando hay compromiso genuino, energía disponible y un entorno que cuida a las personas. Sales & Fit: bienestar como ventaja competitiva Desde 2018, en Sales & Fit hemos acompañado a más de 250 empresas en la transformación de sus equipos comerciales. Nuestro enfoque combina: Evaluación inicial del clima y la cultura comercial. Formación en liderazgo consciente y gestión emocional. Dinámicas de equipo enfocadas en confianza, propósito y comunicación. Herramientas SaaS para el seguimiento del bienestar y la productividad. Los resultados hablan por sí solos: Reducción del 25–45% en bajas laborales tras 6 meses de intervención. Mejora del engagement y del clima laboral según indicadores NPS. Mayor retención de talento y mejor experiencia de cliente final. Un nuevo paradigma de liderazgo El verdadero alto rendimiento ya no se mide solo en cierres de ventas, sino en sostenibilidad emocional, actitud proactiva y capacidad de adaptación. Un líder consciente no impone metas, diseña contextos. No fuerza resultados, cultiva condiciones. Y esa transformación comienza con una pregunta: ¿Estoy liderando un equipo exigido o un equipo saludable? Conclusión: bienestar y resultados no compiten, se potencian Hoy más que nunca, las organizaciones necesitan combinar rentabilidad y humanidad. El bienestar no es un gasto, es una inversión directa en el futuro del negocio. Las empresas que lo entienden ya están un paso adelante. Las que lo ignoran, siguen atrapadas en una lógica obsoleta que erosiona su activo más valioso: las personas. ¿Y tú? ¿Cómo cuidas hoy del bienestar de tu equipo comercial?
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